jueves, 4 de octubre de 2007

Esa noche tocaba el flaco

Sueño despierto, veo el paraíso, pero algo no está bien.
Hay música en el jardín del Eden. También un laberinto de gente.
Es de noche, la luz es azul. Hay una persecución. La gente que lo forma no aprueba la persecución, está molesta. Cambian su dibujo en rebeldía.
Si el perseguido logra escapar, será libre para siempre. Si sus perseguidores logran atraparlo, todo se volverá rojo, pero el laberinto está cansado, ya no quiere contenerlos., no quiere una persecución dentro suyo.
Entonces la gente se dispersa. Hay calma, la luz es verde. Ya no hay laberinto, la gente está sentada, conversan entre sí. Perseguidos y perseguidores dejaron de serlo.
No quedan victimas ni victimarios. Ríen, comparten buenos momentos.
Todo vuelve a estar tranquilo en el jardín del Eden.

No hay comentarios.: